Santo Domingo. El candidato a la presidencia por el PLD Abel Martínez acaba de reconocer públicamente fallas o precariedades internas en su campaña, y en ese orden se queja de una poca difusión de sus actividades políticas en los medios de comunicación, y acepta que va a seguir el éxodo de dirigentes del PLD hacia otros partidos políticos, tres factores que atentan seriamente contra un proyecto político presidencial.
Advertencias y reflexiones de varios dirigentes importantes del PLD, miembros de su Comité Político (CP), proyectan y dejan en evidencia que hay una preocupación interna real en esa entidad política y que es un tema que centra la atención de las máximas autoridades de la organización opositora.
La situación de salud de Danilo Medina, quien el pasado 22 de marzo reveló padecer cáncer de próstata, lo saca irremediablemente del accionar político, creando así un vacío notable y sustancial al PLD y a la vez una desventaja y dificultad a la candidatura presidencial de ese partido, a favor de la que venía accionando a través de recurrentes encuentros con productores agropecuarios de diferentes puntos del país, un sector que de algún modo fue “cautivado” por el Gobierno pasado.
La ausencia de Medina, quien se ve forzado a priorizar su salud, por encima de cualquier cosa, deberá verse como el hándicap del partido morado en un tramo que ya marca crucial hacia una carrera electoral que presagia será más que intensa, por lo que los partidos y candidatos necesitarán de las mejores tácticas y estrategias y ahí a Danilo se le conoce como uno de los mejores en la política contemporánea.
En efecto, persuadidos o inducidos por aires de desilusión, pesimismo y desconcertados o turbados por la ausencia de su líder (Danilo Medina), es muy probable que la salida de dirigentes y militantes peledeístas hacia otros albergues políticos, se vuelva más profusas en los siguientes días.
