Santo Domingo. – El regidor Mario Esteban Sosa, Distrito Nacional, planteó que Obras Públicas y Comunicaciones elimine los concursos de programa de construcción de aceras, argumentando que esta viola una ordenanza de movilidad peatonal, la cual debe poseer un ancho mínimo de 2.4 metros, dijo también que la ley de Urbanización y Ornato Público NO.675-44 con la reciente construcción a cerca de un metro de ancho.
“El Ministerio de Obras Públicas está malgastando los más de 4 mil millones de pesos destinados al programa de construcción y rehabilitación de aceras, tal como hicieron los gobiernos de las últimas dos décadas”, indicó el regidor a través de un video colgado en su cuenta de Instagram.
Como opción, Sosa plantea que se cancele la licitación para el programa de remozamiento de las aceras y se cree una comisión para replantear la costosa inversión, cuando aún hay tiempo para hacer el cambio.
“Hacemos un llamado a que el Ministerio de Obras Públicas cancele esta licitación cuyo diseño viola la ley vigente y que el Presidente Abinader cree una comisión, al cual quiero pertenecer, para replantear la inversión en aceras”, manifestó Sosa.
De acuerdo con el funcionario, los parámetros técnicos del programa que ejecuta Obras Públicas establecen que las aceras a construir tendrán un ancho de hasta un metro y las que se van a reparar, se mantendrá el ancho existente.
Sin embargo, añade Sosa, esto es en violación a la ordenanza número 01-2021 de Movilidad Peatonal, emitido por el Concejo de Regidores del Distrito Nacional, la cual llama a un ancho mínimo de 2.4 metros. Pero además infringe la Ley de Urbanizaciones y Ornato Pu´blico número 675-44 que manda a que dos quintas partes de la calle sea para aceras.
Portando una Cinta Métrica, Esteban Sosa midió una acera e ilustró que el metro de ancho con que cuenta el espacio de los transeúntes no es suficiente para dos personas caminar una al lado de la otra, o para que ciudadanos en sillas de ruedas puedan transitar, tampoco es suficiente espacio para pasear un bebé en coche, “mucho menos cabe un árbol cuya sombra es imprescindible para caminar” puntualizó.
Por José De La Cruz.
